Foto: Pan y Circo de Saul Landell
El circo electoral ha comenzado.
Hay títeres, payasos, marionetas,
Bufones de la Corte del pasado
Y artistas en el cambio de chaqueta.
Es época de mítines y fotos;
Al menos mientras dure la campaña,
Que luego, cuando ya se emita el voto,
Saldrán a relucir esas patrañas.
Hay poco domador y mucha fiera,
Y fieras que resultan indomables.
Algún funambulista, que aunque quiera,
Su arte no resulta practicable.
Hoy día no es el circo lo que era,
Pues ya ni se respeta al respetable.
Es que ya nada es lo que era, y no es que yo piense que cualquier tiempo pasado fue mejor, pero es que se escucha cada cosa y en estos tiempos de mítines lo rematan.
ResponderEliminarDeberíamos escuchar por parte de todos nuestos magníficos políticos, entre otras muchas cosas, como evitar ciertas respuestas en exámenes, de ésto tú sabes mucho. Escuchaba hoy en la radio respuestas de exámenes:
Pregunta ¿que es un movimiento Adaggio?
Respuesta, ésto en mi libro no viene.
Pregunta ¿que es un movimiento Allegro?
Respuesta, cuando la orquesta está muy contenta.
Podrían preocuparse de la educación, porque sino los mítines dentro de 20 años comparados con los de ahora, no quiero ni pensarlo.
O quizás es que tienen un máster en sentido del humor, estos estudiantes...
ResponderEliminar(Es broma...)
En cualquier caso, gracias por las risas.
Pues sí, Uma, nada es como era. Y lo más terrorífico es que dentro de poco será peor, como tú bien vaticinas.
ResponderEliminarClaro, Marié, por lo menos reírnos.
ResponderEliminar¡Ojalá fuera broma! pero con estos chavales reirnos, nos reimos.
ResponderEliminarYo no sé si es que cada vez actúan peor o si será porque de tanta mentira tienen que sobreactuar, pero los actores cada vez son más malos.
ResponderEliminarMe alegra mucho tu visita a mi nueva casa. Muchas gracias. Espero que nos sigamos leyendo.
Un abrazo.
Con lentitud e interrupciones, pero con ganas, seguiremos leyéndonos. Gracias a ti, Mercedes.
ResponderEliminarEsos mítines de palabras vacías y repetidas hasta la saciedad los está acallando la voz de la gente en la calle
ResponderEliminarUn abrazo
Ojalá la indignación no cese, Isabel.
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