sábado, 11 de julio de 2009

Relajación

Foto: El baño de sales olorosas, Julius

"El Arte es la vida, pero con otro ritmo".
Muriel Barbery

Siguiendo algunos de vuestros consejos me estoy relajando. También en el sentido más literal del término. Meterse en una bañera caliente llena de polvos de leche (aunque no sean de burra) es, sin duda, una de las mejores maneras de hacerlo.

Aquí donde estoy yo, el agua no es un problema, así que, todas las noches -sin faltar una- me tumbo a no pensar durante al menos un cuarto de hora. Enciendo una barrita con mi incienso favorito y sin música ni luces -ni mias ni del baño-, ahí me quedo, sola con mi soledad. No necesito imaginarme un paraíso propio porque estoy en él. Noto cómo la sangre recorre dulcemente todo mi cuerpo y cómo los nervios, todos, se van aflojando uno a uno, despacito. Siento difuminarse, hasta casi desaparecer, todo lo que queda fuera de los límites de la bañera. Hasta yo misma podría escurrirme con facilidad por el desagüe, pero, voluntariamente, me quedo y dejo escapar sólo los malos pensamientos. Por fin, cuando al salir me seco, me noto otra, distinta, más ligera, lista para caer en los brazos de Morfeo.



21 comentarios:

  1. ...y Morfeo estará encantado de encontrarse con alguien tan etérea, tan relajada, tan....remojada :-)).
    Jajajajaj, perdona la broma Emi, pero la envidia me corroe. Goza de todo éso también por mi que, para empezar, no puedo ni estirarme en la bañera :-)).
    Un beso y sigue disfrutando de ese super-estatus.

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  2. La foto de Julius está muy conseguida y transmite toda esa relajación que cuentas.

    Un abrazo

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  3. Me recuerda al cuadro de Frida Kahlo "Lo que vi en el agua",
    y ese pie...mmmm....me suena al de la pasada entrada, el sordo?

    Un beso Emi, feliz relax y mejor veranito.
    ana

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  4. Entre el atardecer de Cris y tu relajante baño, habéis heco que me corroa de envidia... de la sana, pero al fin y al cabo pura y dura envidia cochina.

    Besos y disfruta del relax.

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  5. Qué inspiradora experiencia de meditación... tántrica.

    Da gusto ver cómo estamos aprovechando este verano.
    Si las vacaciones no nos sirven para desarollar la parte más hedonista y epicurea que llevamos dentro
    y para cocinar cada paso del día a fuego lento... (verdad, Arturo?)
    qué desperdicio de vacaciones.

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  6. Gracias, Cristina. Para mi es un superlujo, no sólo por el tamaño de la bañera, sino y sobre todo, por poder hacerlo sin agobiarme con el gasto de agua. Aunque -como soy como soy-, tengo que espantar como si fueran moscas algunas imágenes que se me cruzan por la cabeza justo cuando la estoy llenando.

    El lado menos glamouroso de esto es cuando te tienes que lavar la cabeza. Observa que son dos los grifos, uno de agua caliente (hirviendo, diría yo) y otro de fría. A la hora de aclararse el pelo es muy dificil decidirse dónde meter la cabeza (afortunadamente, esta gente tiene soluciones para todo y usamos una gomita conectada a los dos grifos para mezclar el agua).

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  7. Arturo, la foto es de Julius, pero la idea mía, así pues, en este caso, aristotélicamente hablando, yo soy la señora y él mi esclavo.

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  8. ¡Ana! ¿Cómo sigue ese verano tuyo?

    Sí, yo también me acordé de Frida. En realidad, se me había ocurrido hacer un collage metiendo objetos en la bañera, pero al final en el agua sólo se quedó el fotógrafo (bueno, su reflejo quiero decir) jajaja.

    Ah! Y tienes buen ojo. El pie que oye es el mismo en las dos fotos. El pie que se ve no es el sordo. El sordo es el del juanete que, lógicamente, no muestro. Tratando de hacer cosas nuevas este verano, me pinté las uñas de esa guisa y ¡me han gustado!

    Disfruta tanto como puedas, Ana.

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  9. Marié, es lo marvilloso que tiene el año, el verano. Por cierto, me tienes que contar cómo estás aprovechando tú tus vacaciones. Seguro que tienes buenas ideas para compartir.

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  10. Jajaja, Carlos. Pues nada, a pasearse y a meterse en la bañera después (bueno, si estás en Madrid o en algún otro lugar seco de España, no debe abusarse) , si no a la piscina, o lo que tengas más a mano. Lo del crío no es un problema, ya sabes, a turnarse.

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  11. Emi, la verdad es que me adhiero al coro de todos los envidiosos de esos fantásticos momentos-bañera que vives, aunque más que una experiencia tántrica como dice Mariè me parece una experiencia más bien ascética, un encuentro muy íntimo entre el agua, tu cuerpo y el reflejo tenue del rostro de Julius mientras fotografiaba tus pies (por cierto, también me parece bonito el color que has dado a tus uñas, y me gusta la delicadeza con la que has sabido ocultar el juanete -tampoco será para tanto, seguro...- ¡pero no tenías que habérnoslo dicho porque con la maestría con la que lo habías ocultado ni lo habíamos supuesto!)
    También coincido con lo que dice Cristina Catarecha: Morfeo te habrá recibido encantado en sus brazos con lo bien predispuesta que ibas a su encuentro...
    Ah!Gracias por incluir en tu blog la cita de Muriel Barbery (perdona, soy un maniático de la ortografía y me ha dado cuenta de que te escribí mal el apellido, que no es Burbery, sino Barbery).
    Os deseo a todos los bloggeros de Aquí que este verano encontréis lugares ten relajantes como el que ya disfruta Emi: Fer.

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  12. Mucho cuidadin con escurrirte por el desagüe que visto lo relajadita que estás, realmente da esa sensación, como muy bien dice Arturo, cualquiera diria que te vas a escurrir y ¿que haría esta cosita que tengo aquí en este momento y, creo que, mas relajada que tú?. Y lo de los malos pensamientos ¿que malos pensamientos? si tú hace muchos años eres como Mª Teresa de Calcuta? jajaja, simplemente relájate sin más. Por cierto me han encantado los pies, me los he pintado igual son un poquito mas grandes pero no mucho ¿vale? jajaja.

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  13. Fer, ya mismo voy a corregir el error, pero te recomiendo que por Aquí no sufras por ess cosas porque errores y erratas habrá a montones.

    No veas lo bien que duermo no sólo por el baño relajante sino también por las palizas a andar que nos metemos.

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  14. ¡Maripili! Ya te echaba de menos. Cuidame esa cosita ¿vale?

    Ya quisiera yo parecerme a Teresa de Calcuta, pero, puestos a elegir, preferiría parecerme a Vicente Ferrer, ya sabes que es mi favorito.

    Lo de las uñas está muy extendido, pero mi inspiradora natural es una "coolhunter" de primera magnitud con la que comparto media vida, mi queridísima amiga Marta.

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  15. Tántrica, ascética, no hay tanta diferencia, Fer -quizás sólo en la manera de experimentarlo y, a veces, ni siquiera en eso.
    Como Epicuro tenía poco que ver con la marca de puros o la revista del mismo nombre que habla de coches de lujo y mansiones millonarias.

    Qué hago yo este verano, Emi?
    Saborear los momentos, igual que tú, siempre que estoy a salvo de los requerimientos de mi hija adolescente (el jueves se va de vacaciones) y de mi madre enferma, a la que le está sentando bastante mal el calor del verano, como es habitual.
    Aún así, protejo los momentos de meditación, los paseos en bici al gimnasio, los baños en el mar y los largos en la piscina exterior al anochecer -como tú en tu piscina; aunque yo sí me disuelvo en el agua y el agua en el aire y toco las estrellas con mi cuerpo sin manos.
    Y alguna que otra cena de amig@s y aniversarios que se van colando. Buen vino, buena gente, amor del bueno.

    Y mis preciadas entrevistas, la próxima con Jordi Nadal (El paraíso interior).

    Y a partir del viernes (apenas unas horas después de despedir a mi hija) ya estoy disfrutando del paraíso de las dakinis en Manjusri, son sede en Inglaterra.

    No seré yo quien se queje.

    Quizás no vuelva a visitar tu casa hasta el 10 de septiembre.

    Pero, de momento, sigo aquí -intentando no perder ni un sólo instante.

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  16. Wow, Marié. Eso suena fenomenal. ¡Cómo te voy a echar de menos! Bueno, espero que algún email que otro me mandarás ¿no?

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  17. Jajajja....

    Pues no creo...

    Pero de todas formas, aún podré disfrutar de tu blog durante esta semana.
    Y luego lo reencontraré como un diluvio de magníficos sueños samsáricos.

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  18. Hola Marié ya he leido que tienes un verano nada aburrido, y que vas a estar fuera hasta Septiembre, asi que me atrevo a decirte que disfrutes que estoy segura que eso lo conseguirás sin dificultad, y a la vuelta vas a tener un montón de cosas que contarnos, ya sabes yo sigo con la mente del principiante y de hecho voy a intentar enterarme que es eso de "dakinis en Manjusri" hala ya me dejas con tarea para las vacaciones.

    Hasta pronto.

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  19. Manjusri es el nombre de un templo budista, en Inglaterra.
    Y "el paraíso de las dakinis" se refiere a una tierra pura, que en realidad se refiere a una mente apacible que transforma lo que le rodea en un entorno apacible.
    No es más que una práctica de meditación.
    Difícil, cuando en la vida cotidiana las cosas se ponen durillas, con personas muy dependientes que se asustan si te vas y todo parece un sabotaje.
    Pero, como todo, es una práctica más.
    Si consigo irme, estaré en la tierra de las dakinis de Inglaterra y si me tengo que quedar, estaré en el paraíso de las dakinis de AqUIesToYyo.
    Y otros similares menos virtuales e igual de inspiradores.

    Feliz verano para ti también, maripili.

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  20. Gracias por la aclaracion, Marie. Yo tambien tenia que buscar la informacion.

    Me gustaria mucho empezar ese camino que estas haciendo, pero voy dejandolo y dejandolo. Un dia hare algun retiro, estoy segura. Entre tanto, menos mal que estas tu por aqui.

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  21. Bueno, Emi, porque tienes un corazón y una casa muy grandes y dejas entrar a todo el mundo por aquí y, como decíamos, cada loco con su tema.
    Yo, a veces, te explico mis movidas porque me preguntas (o maripili, en este caso) y otras sencillamente porque me enrollo como una persiana.
    Ya te dije que soy de tu club -según dices, yo nunca te he visto hablar demasiado.

    Tú nos hablas de cultura y yo a menudo acabo hablando de... meditación. Quizás porque el arte y la cultura a menudo me producen el mismo efecto de expansión.

    O quizás porque tengo que recordármelo para afrontar algunas situaciones durillas de la vida sin romperme ni romper a nadie.

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Cuéntame, te escucho atentamente.