Foto: Mis hermanas y yo a finales de los 60, de papá
"Husbands come and go; children come and eventually they go. Friends grow up and move away. But the one thing that's never lost is your sister."
Gail Sheeny
Hemos transitado los mismos caminos, leído los mismos libros, compartido dichas y curado mutuamente nuestras heridas. Siempre unidas en la libertad de sentir, con la certeza de ser aceptadas y queridas, sin más obligación que la de ser nosotras mismas.
Escucharnos,
aconsejarnos,
comprendernos,
ayudarnos,
sorprendernos,
regocijarnos
y sufrir.
Nuestros gustos casi siempre coinciden, nuestros recuerdos a veces no, pero nos conocemos como nadie nos podrá nunca llegar a conocer. Las tres nos parecemos y somos, sin embargo, absolutamente distintas. La mayor, con los pies firmes en la tierra, nos sujeta. La mediana nos ayuda a tocar el cielo con su imaginación. Y yo, la más pequeña, agarrada al cielo y a la tierra, disfruto de la suerte inmensa de tenerlas a ellas como maestras y mejores amigas para siempre.
Es la seguridad de saber que nunca me fallarán, lo que hace que las quiera, si cabe, aún mucho, mucho más.
William-Powell-Frith
Judith Anderson
Sir William Blake
Balthus
Bo Barlett
Sarah Detweiler
Rene Dumont
Vladimir Dunjic
Paul Gaugin
Michael Jurogue Johnson
Ivan Maleki
Paddy Martin
Henry Matisse
Henry Matisse
Dyanne Parker
William Matthew Prior
Joseph Raphael
Auguste Renoir
Larry Riley
Dante Gabriel Rossetti
Nancy Ruhl
James Sikes
Andrew Skyjarenko
Joaquín Sorolla
Georgia Suwanee
Edmund C. Tarbell
Fernando Ureña
Palma Vecchio
Emile Vernon
Gary and Suzy Zahradka
Las Tres Hermanas de Gerardo Diego
Estabais las tres hermanas,
las tres de todos los cuentos,
las tres en el mirador
tejiendo encajes y sueños.
Y yo pasé por la calle
y miré... Mis pasos secos
resonaron olvidados
en el vesperal silencio.
La mayor miró curiosa,
y la mediana riendo
me miró y te dijo algo...
Tú bordabas en silencio,
como si no te importase,
como si te diese miedo.
Y después te levantaste
y me dijiste un secreto
en una larga mirada,
larga, larga... Los reflejos
en las vidrieras borrosas
desdibujaban tu esbelto
perfil. Era tu figura
la flor de un nimbo de ensueño.
... Tres erais, tres, las hermanas
como en los libros de cuento.
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Magnífica selección de imágenes, versos y emociones. Un abrazo
ResponderEliminarPreciosa entrada,wapa!!!
ResponderEliminarQué suerte tienen tus hermanas de tener una pequeña con esa sensibilidad y qué suerte tú de poder compartir tanto con ellas...
Bsazos
Gracias, Arturo.
ResponderEliminarSí, Martuka. Tengo mucha suerte. Y además te tengo a ti. Si ellas son mis hermanas-amigas, tú eres mi amiga-hermana.
ResponderEliminarTengo que enseñarte algo la próxima vez que te vea (espero sea muy prontito).
Un beso de amigarmana.
jo emi, me he quedado sin palabras, me uno al sentir de Martuka valorando nuestra suerte,la de tus hermanas, por tenerte en esa posicion tan maravillosa de hermana-amiga. Yo me siento muy agradecida por las dos hermanas-amigas que siento siempre tan cerca y a las que tanto necesito.Un beso muy dulce.
ResponderEliminarMenudo post, estoy impresionada. Todas las imágenes son bellísimas, pero déjame que te diga que la primera fotografía, la de tus hermanas y tú, es toda una historia de amor. Enhorabuena.
ResponderEliminarUn abrazo.
María, te quiero, cielo. Yo también os necesito.
ResponderEliminarQué bien lo expresas, Mercedes. Bien dices: una historia de amor. De esas fotos hay muchas, en blanco y negro y en color.
ResponderEliminarMuchas gracias y un beso.
Bueno, lo conseguiste, se me cayó una lagrimita, de emoción y de alegria, que maravillosa entrada, merece un premio y por eso yo te lo doy, el premio a la SENSIBILIDAD, a la TERNURA, en fín al AMOR con mayúsculas, que bonita foto (por cierto yo no la tengo, bruja) y que preciosa selección de fotografias, te lo has currado.
ResponderEliminarDe verdad somos muy afortunadas, TE QUIERO, OS QUIERO A LAS DOS TANTO, TANTO que me dan gana de gritarlo a los cuatro vientos (bueno me parece que lo estoy haciendo).
Yo que tengo la suerte de tener tres hijas, espero que se quieran la mitad que nosotras.
Gracias y besos a todos. ¡Estoy mas tierna que el dia de la madre!
Gracias y besos a todos
Emocionante post!
ResponderEliminarTan cierto es que con el paso del tiempo ,los hermanos , aún siendo diferentes en posturas y en la forma de ser , estamos siempre con el abrazo necesario , la advertencia justa ,la palabra precisa , el amor incondicional.
Lejos o cerca permanecemos aferrados por medio de un cordel invisible que transmite fuerza , calidez , energía y presencia.
Significativas imágenes.
Elocuentes y bellas.
Uma, querida, no te voy a decir todo lo que te quiero yo, que bien lo sabes. Gracias a ti por ser tan maravillosa.
ResponderEliminarGracias, Carmela. El tiempo ahonda las diferencias o las mitiga, en nuestro caso ha estrechado los lazos que siempre nos han unido.
ResponderEliminarHola Emi,te ha sido concedido el premio Dardos.
ResponderEliminarSi así lo deseas, pasa por mi blog a recogerlo.
Un beso.
¡Wow, Cristina, muchas gracias! ¡Qué ilusión! Paso ahora mismo a recogerlo.
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