En la Semana Santa de 1978, visité por primera y única vez en mi vida, una casa de indianos cerca de Luarca, Asturias. Recuerdo su espectacular cocina de azulejos blancos, que no llegaban a cubrir del todo las paredes debido a su extravagante altura. Recuerdo también el fogón de carbón, enorme y aterrador- triple del que había en mi casa cuando yo era muy, muy pequeña. En cambio, a pesar de su más que probable espectacularidad, no soy capaz de evocar su fachada.
De Ribadeo a Castro-Urdiales, pueden encontrarse ejemplos de esta arquitectura singular. Además de un fantasma, las casas de indianos suelen tener en su jardín una palmera, que desvela el origen ultramarino de la abundante fortuna amasada por sus dueños. Cuando una sola torre aparece, su perfil asimétrico las hace, en mi opinión, aún más interesantes. Eclecticismo y ostentación se dan la mano como características principales de estos originales palacetes asturianos
Pertenecían todos ellos a emigrantes retornados, entre finales del XIX y principios del XX, que habían partido para Cuba, Venezuela o algún otro destino ultramarino para escapar del servicio militar obligatorio o por el deseo de emular a aquéllos que habían retornado con sus jipijapas y bolsillos llenos de dinero.
Parte del encanto asturiano se debe a los vivos colores de estas casas cuyas paredes encierran historias familiares que me encantaría descubrir.
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FOTOS: Julius, Alberto Santo Tomás (asturiano de pura cepa)
Son hermosos monumentos a la memoria perdida, de cuando eramos emigrantes, que dan un sabor especial a esa bella tierra asturiana. Que ganas tengo de cojer las vacaciones.
ResponderEliminarEse tipo de construcciones son comunes en muchas partes de España, sobre todo en la costa. Las que sacas en las fotos están muy cuidadas y son muy bonitas pero, no se por qué, me llaman mucho la atención las que presentan un aspecto destartalado, abandonadas, salvajes. El pequeño jardín totalmente abandonado, la casa cubierta de hiedra y un aspecto mohoso y herrumbroso...
ResponderEliminarNo sé, es como si tuviesen todo el peso de su historia encima...
Besos
Arturo, por lo visto, los emigrantes cántabros, en general, y asturianos en particular, tenían unas características bien distintas de los emigrantes gallegos. No salían tanto por necesidad como por el deseo de encontrar fortuna. Eso sí, la alcanzaban trabajando durísimo.
ResponderEliminarDesde hace tiempo casi todos los años nos damos una vuelta por allí gracias a unos amigos. Es un paraíso pese a la especulación inmobiliaria.
Isg, las encuentro a todas fascinantes, pero es verdad que las historias que encierran es lo que más atrae de ellas. Si fuera cineasta, me inventaría una historia familiar,una saga, partiendo de una casa abandonada como las que a ti te gustan. Al final de las que yo he coleccionado hay una así. Está en Arriondas. No se puede entrar en ella porque tiene una valla eléctrica que la rodea y, además, está que se cae, pero conserva la enredadera de la fachada.
ResponderEliminarMi abuelo fue uno de llos, de esos que con 12 años emigraron a Cuba. Puse un post "mi abuelo" el año pasado en el blog. Bueno él no hizo tanta fortuna como para hacerse una casa de esas.
ResponderEliminarSiempre me ha gustado la arquitectura, en Cantabria hay como en Asturias muchas de estas casas.
Yo tube la suerte de participar en la rehabilitación y promocion de una de ellas, ya que me casé con alguien que tenia una preciosa, enorme, junto al mar.
Luego la reconvertimos en apartamentos y pisos y se vendió.
Son casas imposibles de mantener hoy en día. En Cantabria conozco muchas, en Comillas, aunque tambien algunas de Asturias, esa que sale en una de las fotos, La casa azul que ahora es un museo Asturiano, la recuerdo pasando San Vicente de la Barquera, en un pueblo pequeñito.
Un beso emi,
ana
Un poquito de historia sobre los indianos: Para empezar, no todos los que se fueron a América y volvían eran indianos, sólo aquellos que volvían con una fortuna, pero hubo muchos, los más, que apenas conseguían sobrevivir. También es un tópico que fueran aventureros: esta emigración de tipo laboral y que se realizó en toda España (en zonas como la cornisa cantábrica, Canarias, Cataluña, etc. fue más numerosa)tuvo varias causas como las crisis agrarias, el abaratamiento de los transportes, la navegación a vapor, la evasión del servicio militar, las redes de información, la diferencia salarial y necesidad de mano de obra de las jóvenes repúblicas americanas... entre otras. A los indianos les gustaba demostrar de forma ostentosa su capital y gracias a eso muchos pueblos mejoraban en infraestructuras, restauración de iglesias, educación, etc...
ResponderEliminarUn dato: se calcula entre 3,5 y 5 millones el número de españoles que emigraron y entre 2,5 y 4 millones los que retornaron.
María
Gracias por la interesante información y los datos que aportas. Es un placer ir aprendiendo de forma tan amena.
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