Foto: Carpe Diem (vive al maximo)* de saul landell* La sociedad de los mercaderes muertos
Letra: Ama, ama y ensancha el alma de Extremoduro
Ama, ama y ensancha el alma.
Quisiera que mi voz fuera tan fuerte
que a veces retumbaran las montañas
y escuchárais las mentes social-adormecidas
las palabras de amor de mi garganta.
Abrid los brazos, la mente y repartíos
que sólo os enseñaron el odio y la avaricia
y yo quiero que todos como hermanos
repartamos amores, lágrimas y sonrisas.
De pequeño me impusieron las costumbres
me educaron para hombre adinerado
pero ahora prefiero ser un indio
que un importante abogado.
Hay que dejar el camino social alquitranado
porque en él se nos quedan pegadas las pezuñas
hay que volar libre al sol y al viento
repartiendo el amor que tengas dentro.
Quisiera que mi voz fuera tan fuerte
que a veces retumbaran las montañas
y escuchárais las mentes social-adormecidas
las palabras de amor de mi garganta.
Abrid los brazos, la mente y repartíos
que sólo os enseñaron el odio y la avaricia
y yo quiero que todos como hermanos
repartamos amores, lágrimas y sonrisas.
De pequeño me impusieron las costumbres
me educaron para hombre adinerado
pero ahora prefiero ser un indio
que un importante abogado.
Hay que dejar el camino social alquitranado
porque en él se nos quedan pegadas las pezuñas
hay que volar libre al sol y al viento
repartiendo el amor que tengas dentro.
Una poesía preciosa, que descubre la vardadera naturaleza humana, tantas veces maquillada por una educación que sólo atiende objetivos económicos, tan lejos de nuestra propia idiosincrasia. Hay que ser muy valiente para decidir ser indio y no simplemente abogado, a dode nos había conducido una formación materialista. Enhorabuena por esta poesía, que abre muchos caminos interiores hacia la libertad personal. Un abrazo.
ResponderEliminar¿Qué más se puede decir? Ojalá algún día todos gritemos juntos este canto.
ResponderEliminarUn abrazo.
eMi...
ResponderEliminar"Abrid los brazos, la mente y repartíos que sólo os enseñaron el odio y la avaricia y yo quiero que todos como hermanos repartamos amores, lágrimas y sonrisas..." Ojalá se cumpla algún día querida amiga. No conocía esta canción de Extremoduro, pero me ha encandooo.
Un besote
Espero que, como Jesús, no prediquen en el desierto. No puedo oir la canción, no se que le pasó a esto del goear, pues antes lo oía. Un afectuoso saludo.
ResponderEliminarFernando, me alegro que consideres poesía a esta canción. Yo también la meto en esa categoría, pero quiero recordarte que es de Extremoduro (lo digo por la enhorabuena que me das).
ResponderEliminarUn abrazo.
Eso es la utopía, Mercedes. Hay que seguir soñando.
ResponderEliminarFelix, he de confesarte que yo tampoco la conocía. Lo que son los prejuicios. Me he vuelto una fan de las letras de las canciones de este grupo (no tanto de sus interpretaciones).
ResponderEliminarEn el desierto estamos, Mateo.
ResponderEliminar(Pues yo la he probado y ¡funciona!)
eMi...
ResponderEliminarMuy cierto amiga. En ocasiones nos dejamos llevar por los prejuicios y, al menos en esta canción demuestran ser comprometidos. Otra cosa es su puesta en escena, bueno, yo es que soy demasiado clásico para eso ;)
Un beso
Si que funciona, amiga, es el mío el que se declaró en huelga. Un saludo.
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